Cómo se impulsa la economía creativa desde cero

Camina por cualquier calle del barrio Avondale de Chicago y encontrarás música, color, movimiento y vitalidad cultural, arraigados en la historia y reinventados por una nueva generación. Lo que está sucediendo en Avondale es más que la revitalización de un vecindario; es un vistazo a los latidos de la economía creativa de Illinois. Esta energía no proviene únicamente de las salas de juntas o las oficinas gubernamentales, sino que proviene de las aulas, los escenarios comunitarios y los centros culturales como la Alianza Artística Puertorriqueña (PRAA), y resuena en los vecindarios de todo el estado.

La economía creativa, que abarca industrias como la música, el diseño, las artes visuales, los medios de comunicación y el patrimonio cultural, representa más que solo entretenimiento. Es un poderoso motor del crecimiento económico, la creación de empleo y la innovación. Según la Oficina de Análisis Económico de los Estados Unidos, las industrias creativas aportan más de 1 billón de dólares a la economía nacional al año. En Illinois, esto se traduce en miles de empleos y miles de millones en ingresos que impactan directamente en nuestras comunidades.

Pero la verdadera historia radica en cómo crecen estos sectores creativos y quién garantiza que sean accesibles, inclusivos y arraigados en su lugar.

Durante más de 27 años, la PRAA ha sido tanto un centro cultural como un catalizador económico. A través de programas como nuestro Proyecto de Música Latina, el Festival Nacional del Cuatro, la serie de conciertos Desde Mi Barrio y la educación artística en las escuelas, estamos dotando a los jóvenes tanto del orgullo cultural como de las habilidades transferibles que conducen a carreras creativas. No se trata solo de programas de arte, sino de canales de desarrollo de la fuerza laboral e incubadoras de talento. Nuestros artistas docentes, músicos y profesionales de la cultura son educadores, mentores y emprendedores.

Pensemos en esto: cada vez que un joven aprende a tocar un instrumento, se emplea a un artista docente. Cuando PRAA organiza un concierto comunitario, los vendedores locales, los técnicos de sonido y los diseñadores se benefician todos. Cuando invertimos en preservar las artes puertorriqueñas, también invertimos en la creación de empleo, las oportunidades para los jóvenes y la vitalidad del vecindario.

Las organizaciones culturales sin fines de lucro como PRAA desempeñan un papel esencial en el ecosistema de la economía creativa de Illinois. Estamos en una posición única para llegar a las comunidades que a menudo quedan fuera de los modelos tradicionales de financiación de las artes. Escuchamos las necesidades de nuestros vecindarios y creamos programas que responden en tiempo real, con autenticidad cultural y oportunidades económicas.

Sin embargo, a pesar de nuestro impacto, las organizaciones artísticas comunitarias a menudo operan sin una financiación estable y a largo plazo. A medida que nos recuperamos de una pandemia que devastó el sector de las artes y ahora nos enfrentamos a nuevos desafíos de financiación federal, es hora de que los responsables políticos, los financiadores y los líderes cívicos reimaginen lo que significa apoyar el desarrollo económico.

Invertir en la economía creativa significa invertir en organizaciones que reflejen la diversidad, la resiliencia y el talento de nuestras comunidades. Significa ver la educación artística no como un lujo, sino como un camino hacia la universidad, las carreras y un propósito para toda la vida en campos como la producción, los medios de comunicación, las artes escénicas y la tecnología. Significa reconocer que un concierto no es solo un evento cultural, es un trabajo, una oportunidad de mentoría y una chispa que impulsa las empresas locales.

En PRAA, creemos que cuando se invierte en cultura, se invierte en las personas. Y cuando inviertes en las personas, las comunidades prosperan.

Pero este trabajo no puede esperar. A medida que los vecindarios de Illinois se enfrentan al crecimiento, el desplazamiento y la renovación, debemos actuar ahora para garantizar que las artes y la cultura sigan siendo el centro de nuestro futuro económico, y no una idea de último momento. La economía creativa no solo está viva, sino que está creciendo. Démosle los recursos, el reconocimiento y el respeto que se merece.

El futuro de Illinois es creativo y se está construyendo desde cero. Construyámoslo juntos.

Me encantaría escuchar tus opiniones, ideas o formas en las que te gustaría participar. Ponte en contacto conmigo directamente en Ignacio@PRAAChicago.org. Sigamos creciendo esta conversación, y este movimiento.

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